lunes, 10 de noviembre de 2025

Poemas 18. Rosalía de Castro “Estaciones”

Me gustaron estos versos de Rosalía de Castro. Aparecieron en una publicación de Facebook y, como no los conocía, me puse a indagar. Se trata de un fragmento del poema titulado "Estaciones".

Hacía mucho tiempo que no leía a la buena de Rosalía. De vez en cuando las redes tienen su lado positivo. ¿Qué os parece? ¿Os suelen motivar a releer autores que ya casi teníais olvidados?
😊




Aquí os dejo el poema completo.

Estaciones

Rosalía de Castro

 

Adivínase el dulce y perfumado
calor primaveral;
los gérmenes se agitan en la tierra
con inquietud en su amoroso afán,
y cruzan por los aires, silenciosos,
átomos que se besan al pasar.
Hierve la sangre juvenil; se exalta
lleno de aliento el corazón, y audaz
el loco pensamiento sueña y cree
que el hombre es, cual los dioses, inmortal.
No importa que los sueños sean mentira,
ya que al cabo es verdad
que es venturoso el que soñando muere,
infeliz el que vive sin soñar.
¡Pero qué aprisa en este mundo triste
todas las cosas van!
¡Que las domina el vértigo creyérase!…
la que ayer fue capullo, es rosa ya,
y pronto agostará rosas y plantas
el calor estival.
Candente está la atmósfera;
explora el zorro la desierta vía:
insalubre se torna
del limpio arroyo el agua cristalina,
el pino aguarda inmóvil
los besos inconstantes de la brisa.
Imponente silencio
agobia la campiña;
sólo el zumbido del insecto se oye
en las extensas y húmedas umbrías;
monótono y constante
como el sordo estertor de la agonía.
Bien pudiera llamarse, en el estío,
la hora del mediodía,
noche en que al hombre de luchar cansado
más que nunca le irritan,
de la materia la imponente fuerza
y del alma las ansias infinitas.
Volved, ¡oh, noches de invierno frío,
nuestras viejas amantes de otros días!
Tornad con vuestros hielos y crudezas
a refrescar la sangre enardecida
por el estío insoportable y triste…
¡Triste!… ¡Lleno de pámpanos y espigas!
Frío y calor, otoño o primavera,
¿dónde…, dónde se encuentra la alegría?
Hermosas son las estaciones todas
para el mortal que en sí guarda la dicha;
mas para el alma desolada y huérfana,
no hay estación risueña ni propicia.



domingo, 2 de noviembre de 2025

Momentos 43. “La ciénaga de los hipopótamos” de Pauline Gedge

Con el corazón apesadumbrado, Seqenenra volvió a subir a la litera y fue conducido al campo bajo la luz violácea de la tarde. “No existe destrucción capaz de igualar la tristeza de mi lenta desintegración”, pensó, al notar la silenciosa preocupación de Si-Amón. La misma aura de patetismo los envolvía a ambos. “Los setiu nos conquistaron sin espadas ni arcos, no incendiaron los templos ni mataron a los sacerdotes y, sin embargo, con lentitud, con mucha lentitud, la cara de Egipto está cambiando. La desidia logra, con el tiempo, lo que no pueden lograr las espadas y las flechas”.

 

Mis lecturas. Trilogía “Señores de las Dos Tierras”


Género:
 Novela

Subgénero: Novela Histórica

Autora: Pauline Gedge

Título: trilogía “Señores de las Dos Tierras”:

La ciénaga de los hipopótamos (The Hippopotamus Marsh: Lords of the Two Lands, Volume One, 1998)

El oasis El oasis (The Oasis: Lords of the Two Lands, Volume Two, 1999)

El Camino de Horus (The Horus Road: Lords of the Two Lands, Volume Three, 2000)

Sinopsis:

Seguramente la escritora de novelas históricas sobre Egipto más leída del mundo y autora de grandes éxitos como La dama del Nilo, El papiro de Saqqara y El faraón, Pauline Gedge da comienzo con esta novela a una nueva trilogía denominada Señores de las Dos Tierras, cuyo tema central es la lucha de dos generaciones de la familia Tao para eliminar del poder a los invasores extranjeros, reunificar el antiguo reino egipcio y recuperar sus costumbres y creencias. . .

En este primer volumen nos encontramos en pleno segundo milenio antes de Cristo: Tras centurias gloriosas de conquistas sin par, Egipto se halla sometido al yugo de los hicsos -a quienes los egipcios denominaban setiu o hekaiesut, es decir los caudillos extranjeros-, un pueblo bárbaro llegado del norte para imponerse sobre la corrupta XII dinastía faraónica. Sin embargo, Apepa, el temido rey de los setiu, no puede disfrutar con plenitud de su poder porque al sur, en una pobre y lejana provincia a orillas del Río de la Vida, se encuentra Seqenenra Tao, Príncipe de Weset, descendiente del último faraón, encarnación de Horus e Hijo del Sol. Recluido en sus remotos dominios, Seqenenra es en apariencia un súbdito fiel, pero ante los ojos del monarca invasor es un desafío a su omnipotente autoridad soberana, ya que en un solo reino no hay lugar para dos encarnaciones de la divinidad. Así pues, cuando el rey de los setiu le somete a una serie de pruebas y humillaciones indignas del sucesor del gran Sesostris, conquistador del Nilo, Seqenenra decide acabar con las reales afrentas y poner fin al vasallaje de los suyos, a sabiendas de que el precio a pagar será desmesurado.


Una historia que se lee con deleite cuando se centra en la familia protagonista. Muy detallada y descriptiva. Pero, en mi opinión, se vuelve un tanto pesada y aburrida en el último volumen, cuando se centra en el asalto a los últimos reductos setiu.

No es mala lectura para acercarse a la historia del antiguo Egipto de mano de una autora especialista en el tema. Otra de sus novelas, “La dama del Nilo”, es uno de mis libros favoritos.